¿Cuál es el sentido de mi existencia?
Introducción:
En este ensayo trato de exponer cual es el sentido de mi existencia, dando razones y pequeños ejemplos, del porque decidí cual era el sentido de mi existir; pues ya que esta es una interrogante que crea cierta confusión en el ser, y en este caso, directamente a mí, ya que cuestiona toda mi existencia en este mundo material. Me hace pensar sobre mi necesidad y deseo de tener un sentido para mi existir, de encontrar el porqué existo, por qué estoy aquí.
Desarrollo:
Para poder dar una respuesta a esta interrogante, descubrí que el primer paso, es entrar en contacto conmigo mismo, puesto que “Tenemos que comprendernos a nosotros mismos detrás de todas nuestras actividades” (). Y me di cuenta que, de una forma u otra vivimos engañados, pues desde pequeños nos dan la idea que para poder ser, es necesario hacer y tener, pero el hacer y el tener están determinados por el ser, sin embargo la mayoría de la gente piensa lo contrario debido a su contexto cultural, ya lo diría Eduardo Nicol: “Los hombres son insensatos y se aferran a cosas sin valor” (); con esto llegué a la conclusión que yo no soy, por lo que hago o tengo, yo soy porque soy, independiente de lo que hago y tengo; entonces, ¿para qué estoy aquí?, ¿para qué existo? Para poder dar una respuesta, primero tengo que saber que existo, y surge un nuevo cuestionamiento: ¿Qué soy yo? Pues bien, sé que soy un ser consciente de lo que hago, de lo que está a mi alrededor (pues estoy seguro que, siempre que veo algo, sé que soy yo el que veo), un ser diferente a los demás (único), creador, con libertad y voluntad, que piensa y razona, trascendente y que estoy en este mundo. Con esto, me doy cuenta que en este mundo estoy limitado, pero que sin embargo, estar en el mundo me da el sentimiento de pertenecer a algo (). En cuanto a estas limitaciones, coincido con Coreth, que dice: “A medida que somos conscientes de la limitación, vamos continuamente más allá” (). Pero, ¿por qué y para qué soy así? ¿Qué sentido tiene estar condicionado a un mundo material que impide mi plena comprensión de mi mismo y mi trascendencia?
Y es en este punto, donde después de analizar y reflexionar, me doy cuenta que siempre estoy en busca de más y más, de no ver simplemente lo superficial de las cosas y los acontecimientos, sino, ver más allá…aspirando y tratando de buscar lo verdadero, lo absoluto. Tal vez, es por eso que dicen que: “la humanidad está llena de conflictos y luchas” (5); porque siempre cuestionamos todo lo que existe a nuestro alrededor, estamos en busca de respuestas cuando hay interrogantes, no nos podemos conforma con cosas generales, siempre queremos ver lo más profundo de las cosas, descubrir su esencia. Así, también yo busco una respuesta a todo el misterio que implica el siguiente cuestionamiento: ¿Cuál es el sentido de mi existencia?
El sentido de mi existencia es realizarme como persona, superándome a mí mismo constantemente, siempre yendo más allá de mis limitaciones, en constante crecimiento y evolución de mi ser; porque siento que tengo que trascender, que tengo que ir más allá de este mundo; porque hay algo más allá, que me llama en lo más profundo de mi ser y yo quiero ir hacia ese más allá, hacia esa trascendencia supra-terrenal, que me hace aspirar lo absoluto, teniendo una apertura para entregarme hacia ese misterio, y así, hacer que mi vida no sea vacía, banal. Pero para poder llegar a este último fin, también tengo que convivir con el mundo, con las personas que están a mi alrededor, puesto que forman parte de mi existencia y yo parte de su existencia, por lo que relacionarme con ellos me ayuda a poder llegar a la trascendencia (Cf. Filosofía de G. Marcel), y hay que tener en cuenta que estas relaciones no son destructivas, sino constructivas y mutuas (si yo avanzo el otro también tiene que avanzar). ¿Pero por qué decidí que ése sea el sentido de mi existencia? ¿Para qué seguir viviendo?
A esta interrogante encuentro una respuesta sencilla: porque la determinación de trascender, de ir más allá de mis limitaciones, me impulsa a seguir viviendo (Cf. Filosofía de H. Bergson), a encontrar nuevos horizontes, donde sé que yo estoy ahí, que existo y que puedo formar parte de lo absoluto, junto con otros seres, dándome cuenta que no estoy solo. Esta afirmación, me lleva al compromiso que a lo largo de mi existencia, tengo que ser mejor de lo que soy, que estoy aquí para trascender en un ser más pleno y libre.
Y me doy cuenta que este es el camino que me gusta recorrer. ¿Será este el verdadero sentido de mi existencia? Aunque a veces no sea muy claro, tengo la convicción que es el camino que me lleva a la plenitud de mi ser; y estoy consciente de que existen más caminos, pero cada quien decide que camino quiere recorre a lo largo de su existencia.
Conclusión:
Puedo concluir que, lo que le da sentido a mi existencia es el deseo de encontrarme a mí mismo, excluyendo todo lo material, para poder llegar a la trascendencia; porque para eso existo: para trascender en este mundo. Puesto que siento que este mundo no constituye mi último horizonte de mi realización como persona, siento que puedo llegar a ser más. Pero, ¿quién me asegura que este es el verdadero sentido de mi existencia?
No puedo asegurar esto, pero en lo que si coincido es que: “No podemos aceptar jamás la idea de que la vida está vacía y no tiene un sentido” (6) Y he aprendido que cada quien va encontrando su sentido de existir a lo largo de su vida, y que es por eso que nuestra vida es un enigma y un misterio; y concluyo con estos cuestionamientos: ¿Qué sentido tendría nuestra existencia, si supiéramos para que existimos? ¿Qué es mejor: saber para qué existimos o descubrir para qué existimos?